La depresión es un trastorno del estado de ánimo que puede ser temporal o permanente y se caracteriza por la sensación de infelicidad, culpabilidad, tristeza y ansiedad en diferentes grados.
Generalmente se asocia a la deficiencia de la serotonina
Una monoamina neurotransmisora responsable de controlar e inhibir comportamientos como la ira, el humor, el sueño, el apetito, entre otros.
Es indispensable consultar a un psicólogo, psiquiatra, o a ambos, para determinar de qué manera se puede controlar o erradicar este padecimiento. Por lo general, además de terapia, se recetan antidepresivos que actúan de diferente manera en cada persona. A continuación los enlistamos:
Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS)
Los especialistas los recetan a las personas que no han tenido contacto con ningún tipo de antidepresivos debido a que sus efectos son leves.
Heterocíclicos
Esta categoría se maneja con menor frecuencia que la anterior debido a que sus efectos pueden ser más fuertes.
Inhibidores de recaptación de serotonina y norepinefrina (IRSN)
Por sus bajas contraindicaciones, es posible combinarlos con otros medicamentos y son muy recetados.
Alternativas naturales
Es posible acompañar el tratamiento con alimentos ricos en triptófano, un aminoácido esencial que promueve la segregación de serotonina, como pescado, queso, pollo, leche, huevo, cacahuate, nuez, ajonjolí, calabaza, entre otros; además es necesario complementarlos con Omega 3, que se puede obtener del salmón, arándanos, fresas, frambuesas, chocolate —nuestro favorito—, por mencionar algunos.
Recuerda que la automedicación es lo peor que se puede hacer en estos casos
Nadie como un especialista para brindar el tratamiento adecuado y un plan de nutrición para evitar efectos secundarios (náuseas, pérdida de apetito, disfunción sexual, sequedad en la boca, etcétera); además del apoyo de familia y amigos para salir adelante.