Aceites antiinflamatorios
La manzanilla calma la hinchazón provocada por quemaduras de sol, picaduras y esguinces.
El aloe vera (en crema o loción) es antiinflamatorio, su efecto es mejor cuando se utiliza con lavanda o manzanilla.
Aceites descongestionantes
La salvia, el romero y la menta combaten el resfriado.
El eucalipto es otro de los aceites que funcionan cono descongestionantes nasales.
Aceites relajantes
Ayudan a relajar el sistema nervioso y a liberar la tensión. Son útiles los aceites de jazmín y de manzanilla, que incluso pueden aliviar el dolor de cabeza.
Aceites antisépticos
Se debe tener cuidado con ellos, ya que pueden irritar la piel. Por eso es mejor utilizarlos en vaporizadores e incienso, que en masajes o aceites de baño.
Como ejemplo, puedes utilizar eucalipto, sándalo y rosa.
Aceites estimulantes
Funcionan para estimular tanto la mente como el cuerpo. Proporcionan un sentimiento de bienestar, reconfortan el espíritu y reaniman el cuerpo. Por ejemplo: los aceites cítricos.
Algunos aceites de especias son revitalizantes, como el clavo y la canela, que desvanecen la fatiga mental. Sin embargo, debido a su potencia deben usarse sólo en bajas concentraciones.
Aceites calientes
Los aceites que provienen de las especias (como el de pimienta negra, canela y jengibre) tienen efecto calentadores, porque estimulan la circulación de las extremidades del cuerpo.
La pimienta negra es excelente para frotar los músculos.
Los aceites que contienen alcoholes descongestionan los vasos sanguíneos, brindando mayor calor corporal. Por ejemplo: el aceite de eucalipto se puede añadir a un baño caliente, compresas y para frotar el pecho en las noches de invierno.